¿Conoces el nivel de protección de tu mascarilla o tapaboca?
La mascarilla es un producto sanitario que ayuda a cubrir boca y nariz, sirve como barrera para minimizar las transmisiones de agentes infecciosos entre personas.
Entonces, antes de seleccionar la mascarilla o tapaboca correcta debes saber la diferencia entre la eficiencia de filtración de partículas y la eficiencia de la filtración bacteriana, estos términos se refieren a la capacidad de permeabilidad de la mascarilla, donde;
- Filtración de partículas; son pruebas donde se utilizan partículas en aerosoles y sirve para identificar si tu mascarilla retiene el pasó de partículas inertes como polvo, gotículas, etc. Si tu mascarilla cumple con este parámetro en el empaque debe declarar su valor de PFE (filtración de partículas) en porcentaje.
- Filtración Bacteriana; es una prueba de permeabilidad donde se analiza el paso de microorganismo, en el caso de las mascarillas quirúrgicas deben tener un valor de 95% o superior de filtración bacteriana, y esto lo podrás ver en la caja de tu mascarilla con las siglas BFE (filtración bacteriana)
Ahora, ¿Cuál de estas 2 modalidades de filtración me protege contra el Covid?, las dos, vamos a relacionar la eficiencia bacteriana con el virus, el Covid tiene una medida entre 0.09 a 0.13 micras y una bacteria mide entre 0.2 a 1 micrómetros de diámetro, el virus para poder migrar necesita adherirse a un agente de mayor tamaño en este caso se adhiere a las gotículas de saliva por eso las mascarillas con BFE > 95% son las más recomendables a usar.
A continuación, te compartimos un estudio que realizó la universidad de Cambridge, con las diferentes telas de mascarillas probando con Partículas de Bacteriófago MS2 (5 veces más pequeñas que el coronavirus) donde se obtuvo los siguientes resultados:
También la Universidad de Cambridge sugirió que el ajuste de este implemento es igual y hasta más importante que el material del que está hecha. Así que trata que tu mascarilla cubra nariz y boca, primero ajusta el clip nasal y luego estira la parte inferior hasta tu mentón, por último, verifica que no quede espacio entre tus mejillas y la mascarilla, en caso que te quede algún espacio ajusta los elásticos.
Nota: durante este proceso evita tocar la parte interna de la mascarilla.